sábado, 4 de febrero de 2012

¿PARA QUÉ Y PORQUÉ?

¿Pero no hemos escuchado la previsión del tiempo para hoy?.
¿No hemos oído la furia del aire durante esta semana y hemos sentido el intenso frío?
¿No nos damos cuenta de la nula posibilidad de alcanzar alguna cima, de llegar a ningún lugar ?
¿No vemos que nos dirigimos de cabeza hacia la ventisca y los negros nubarrones?




 






Lo sabemos, perfectamente, y es que lo hacemos con toda la intención, sencillamente porque queremos. Nos gusta también el mal tiempo, porque nos gusta la vida y por eso nos apetece de vez en cuando sentir el mordisco del frío y el viento. Pero también queremos controlar, hasta dónde y por dónde. Por eso hoy, hemos vuelto a visitar a nuestro amigo el bosque, buscando su protección y cuando hemos visto que el límite se acercaba (todo tiene un límite), no lo hemos dudado y nos hemos dado la vuelta sin pensarlo dos veces.
Regresamos deslizándonos con la alegre sensación de haber vivido, de haber encontrado placer por el mero hecho de estar con la montaña también en estos días de duro invierno.
Somos así de simples, con bien poco seguimos ilusionados, con bien poco mantenemos la hoguera, de nuevo cargada, para aguantar calientes lo que nos echen.

Decididamente, los días grises despiertan  esa neurona intimista que no puedo reprimir, ni quiero.


3 comentarios:

Gabi dijo...

Bonita entrada, y buenas reflexiones la cuales comparto totalmente...
Un saludo y a seguir disfrutando.

magbueno dijo...

Te comprendo, no voy a contar lo que se me congeló ayer esquiando en la Pinilla en Segovia, pese a las previsiones y a una malla debajo del mono...

MANOLI CXM dijo...

CON 2 C*J*N*S ale... si yo te mandara...ufffff en Valencia 9 grados y me parece frío...ufffff anda... Bueno sigo dándote las gracias por el reportaje fotográfico que va de más a mejor, preciosas, impresionantes, increíbles... GRACIAS!!!!!!!