Un nuevo año, y van ya tres (todas las ediciones), nos hemos dirigido a esta bonita carrera que discurre y nos muestra, como bien indica su nombre, todo el dominio de la estación de esqui de Javalambre (Teruel).

Preparándonos antes de la carrera |
Algo menos de participación que en el 2010, dispuestos a disfrutar de esta peculiar manera una mañana fresca, pero luminosa y casi casi primaveral.
Los siete........ y magníficos |
Salida con cautela, ya que la nieve se presenta todavía helada en algún tramo y el recorrido se lanza tentadoramente hacia abajo. No es cuestión de caerse nada más empezar, la carrera es algo más larga que otras ediciones y con la nieve se hará "más larga". Como ocurre en la mayoría de las carreras, las posiciones se van definiendo y me incorporo a un estirado grupo de cuatro corredores que siguen la estela de los otros cuatro de cabeza, que ya han desaparecido, por lo menos de mi vista. Posiciones alternando, en subidas unos, en bajadas otros. El más fuerte de nuestro grupo se va marchando poco a poco a la altura del km 11. Nos estiramos más y más, hasta darme cuenta que no escucho más que mis propias pisadas y jadeos.
Hay que continuar con calma y guardar fuerzas, lo más duro queda todavía y será al final. En el avituallamiento de mitad carrera me cantan mi sexta posición. Hay que andar con mucho ojo para no perder la referencia de las cintas que marcan el recorrido (algunas son de plástico blanco con algo rojo y no se ven muy bien). Se llega así a una zona boscosa preciosa, las huellas de los de delante ayudan a seguir la dirección correcta....hasta que pierdo las cintas, las huellas.....hay que parar, retroceder un poco y volver a encontrarlas. Seguimos.
Al sonido de mis pisadas y resoplidos, se unen las de mis antiguos (y jóvenes) compañeros de carrera, que me han alcanzado. Nos plantamos así los cuatro al pie del durísimo cortafuegos que caracteriza el final de esta carrera, unos 350 m de D+ en 1,5 km.......con lo que llevamos ya. Lo tengo claro, o les dejo en el cortafuegos o no tengo nada que hacer si llegamos arriba juntos en los llanos y últimos metros. Así que tras aguantar los primeros ritmos que van marcando, aprieto, me voy y consigo ir abriendo hueco. Qué raras sensaciones las que se tienen con el máximo esfuerzo.......¿es placer eso que se nota en el fondo de los pulmones?
Hay que continuar con calma y guardar fuerzas, lo más duro queda todavía y será al final. En el avituallamiento de mitad carrera me cantan mi sexta posición. Hay que andar con mucho ojo para no perder la referencia de las cintas que marcan el recorrido (algunas son de plástico blanco con algo rojo y no se ven muy bien). Se llega así a una zona boscosa preciosa, las huellas de los de delante ayudan a seguir la dirección correcta....hasta que pierdo las cintas, las huellas.....hay que parar, retroceder un poco y volver a encontrarlas. Seguimos.
Al sonido de mis pisadas y resoplidos, se unen las de mis antiguos (y jóvenes) compañeros de carrera, que me han alcanzado. Nos plantamos así los cuatro al pie del durísimo cortafuegos que caracteriza el final de esta carrera, unos 350 m de D+ en 1,5 km.......con lo que llevamos ya. Lo tengo claro, o les dejo en el cortafuegos o no tengo nada que hacer si llegamos arriba juntos en los llanos y últimos metros. Así que tras aguantar los primeros ritmos que van marcando, aprieto, me voy y consigo ir abriendo hueco. Qué raras sensaciones las que se tienen con el máximo esfuerzo.......¿es placer eso que se nota en el fondo de los pulmones?
Dura carrera, técnica, satisfecho y contento por el 6º puesto final y 1º de veteranos B. Contento por poder disfrutar mientras corría (pocas veces lo he sentido durante tanto tiempo en una carrera). La nieve embellece y por supuesto endurece. Seguramente habrá más de uno que no estará de acuerdo, pero este año la naturaleza en Javalambre ha conseguido una carrera bella y especial, para no olvidar.
Tornillo reponiendo sales.........¿Isostar, Powerade, Gatorade? |