sábado, 30 de abril de 2011

LUIS MUÑOZ "TOPETE". SU CARRERA EN LA MARATON DE SABLES.

                     A principios de este mes de Abril se disputó un año más, la famosa Maratón de Sables. No es sólo una carrera por etapas en el desierto, es además una dura prueba de convivencia, una autosuficiencia de varios días, con sus incomodidades, sus malos y buenos momentos. Todo ello le confiere una especial dureza.

                     Este año además ha tenido un corredor especial,  nuestro buen amigo Luis Muñoz (Topete), por fin pudo hacer realidad una ilusión y un deseo....participar.

                     Pero sobre todo ha servido para demostrar su fuerza de voluntad, su tesón y su buen rollo.

                     Enhorabuena por su carrerón, 39 de la general y 6º español. Y gracias porque nos ha hecho pasar unos días en vilo y enchufados a internet siguiéndole.

Clicando en la foto podréis ver el video que ha preparado sobre su aventura:

viernes, 22 de abril de 2011

UNA RUTA TURÍSTICA POR MARIA DE HUERVA

                Aprovechando que mi hermano Carlos andaba por Zaragoza, y tenía curiosidad por conocer estos barrancos y montes, nos hemos acercado a María de Huerva en una mañana de Martes fresca al principio, pero sin aire. Perfecta pues para darnos un paseo, alternando el correr con zancadas ligeras, tranquilos pero sin pausas. Perfecto en mi caso para estirar piernas tras el intenso fin de semana.


Muchos montes subidos y muchas horas juntos hemos pasado Carlos y yo durante algo más de tres décadas (que se dice pronto), pero sorprendentemente, esta era la primera vez que salíamos juntos a correr. Era la ocasión perfecta para realizar un recorrido que resumiera y mostrara unos pocos de los secretos que tiene esta zona.

Viendo que el tiempo y las ganas aguantaban, hemos ido perfilando el recorrido sobre la marcha, alargándolo hasta regresar por la plana de La Balsa y su barranco.


                   De María de Huerva, hacia el pie del Castillo, por la rota y breve orilla del Huerva, al mismo pie de los cortados. Ascendemos hasta el castillo siguiendo el empinado sendero que arranca por la vertiente de las huertas e invernaderos y ya hasta el Sillón por el cresteo normal. Bajada al collado del mojón y vuelta hacia María para tomar el sendero cabecero de los barrancos hasta subir a la Plana. Atravesamos los verdes campos de cultivo hasta enlazar con la pista que nos lleva hasta la Balsa y de allí por sendero trialero, descendemos hasta el fondo del Bº de La Balsa y directos a María.
                En esta ocasión nos han salido 16 km para 2h 30 min de trote y zancada.

lunes, 18 de abril de 2011

JAVIERRE DEL OBISPO-OSAN

Lo que pueden cundir un sábado y domingo. Desde luego que éste que hemos tenido es uno de esos fines de semana en el que las cervecitas tomadas nos las hemos ganado a pulso.

3, 2, 1.......Foto de ambargreen.
SÁBADO 16, un kilómetro vertical cronometrado (1.025 m de D+) desde la localidad de Javierre del Obispo hasta la cima de Oturia (5,7 km). Curioso, diferente, extenuante. Hacía tiempo que no notaba esas sensaciones que golpean a uno por dentro, cuando se va al límite del esfuerzo físico. Cualquier movimiento, cualquier gesto diferente a los necesarios para subir, para correr, se quedan aletargados. Recuerdo los ánimos de los corredores que ya habían terminado al cruzarse con los que habíamos comenzado nuestra crono más tarde. Imposible levantar la cabeza del suelo, levantar la mirada para saber quiénes eran o poder hacer un gesto con la mano.

Salir de los últimos en esta ocasión, significa que va a ser muy dificil adelantar o alcanzar a los corredores que han ido saliendo por delante a intervalos de 30 segundos. La mayor parte del recorrido transcurre en una incógnita, sin referencias, en la duda del ritmo que uno lleva. ¿Voy lento?, ¿voy demasiado rápido?

Foto de la organización.

No hay que desfallecer en esta primera parte, pero sin olvidarse de la gran dureza de los últimos metros hasta la cima de Oturia.

Se abre el paisaje y por fin puedo ver a corredores que van por delante, tomar una referencia, un objetivo. Últimos metros donde la cara debe estar ya desencajada, los pulmones se quedan pequeños, las órdenes a las piernas para moverse salen con energía pero la velocidad de respuesta se hace lenta y pesada. Pero todo se acaba. Han sido cincuenta minutos y quince segundos de esfuerzo y cinco minutos para recuperarse y volver a la normalidad, para que el golpeteo interno cese, para que se restablezca el equilibrio de nuevo.

Un segundo menos en el crono o un segundo más, es la diferencia, es un mundo, es una zancada más o una menos, es un latido más o dos, o tres.


DOMINGO 17, Osan cross mountain. Un clásico con tan sólo cuatro años de edad. ¿Qué tendrá esta carrera para que cada año nos juntemos más y más corredores? Para algunos es por su distancia, porque correr 17 ó 18 km es algo "asequible". Para otros porque resume en proporciones no exageradas, las características de una carrera por montaña de más envergadura. Porque plasma perfectamente el ambiente típico entre organizadores, corredores, acompañantes, que se vive en este mundillo de las carreras por estas tierras. Porque marca ya el despertar, tras el largo invierno, de las citas con el calendario de competiciones. Bueno sí, y también por ese plato de migas con su correspondiente huevo que cada año sabe más rico y que ayuda a reponer las energías perdidas.

CLASIFICACIONES        FOTOS ZONA DE LA CASCADA

                                         FOTOS DE LA LLEGADA



GRACIAS y que se continúe muchos años organizando estas carreras.

domingo, 10 de abril de 2011

¿SARRIOS POR LOS BARRANCOS DE MARIA?


 Soleada y calurosa la mañana que hemos tenido para sacar un entreno por la zona de barrancos de María de Huerva. Ya sé que me repito, pero no me canso de decir que este rincón es una muy digna zona para poder entrenar montaña, sin tener que emprender viaje al Pirineo o a otras zonas de Zaragoza. Cuestas muy exigentes, terreno de bajadas empinadas en las que hay que ir con un ojo en cada pie.

Al final nos hemos juntado 5 sarrios, puntuales como reloj suizo: Antonia, Sarrio Mayor, Victoriano, Ambargreen y yo. En María y durante los primeros minutos hemos coincidido con otro sarrio, Toño, que junto a su perra  salían a dar su paseo matinal.


Sarrio Mayor en la cueva-paridera con piscina termal.
 Bº de la Sal.

El recorrido de hoy, ha sido entrar al barranco de la Balsa, tomar el desvío al barranco de la Sal y seguirlo (la entrada a este barranco está pasado el "petroglifo" y  antes de llegar al "bisonte" pintado, a la izquierda). El camino parece no existir, pero en cuanto se salvan los primeros resaltes, se nos presenta ya claro y evidente si seguimos el fondo de la barranquera. Serpenteo estrecho y si una vez ya introducidos nos surge alguna duda por ver bifurcaciones, hacia nuestra derecha. Se pasa por la característica "cueva paridera" y en seguida salimos del barranco por empinado costarrón que nos deja en el cordal fronterizo entre los barrancos de La Sal y Los Pozos. Culminamos en el cabezo La Sal, en la Plana, muy cerca de la conocida pista que viene de Cadrete.
Volvemos por donde hemos venido , descendiendo en recto para tomar ahora el cordal que separa el barranco de Los Pozos (a nuestra derecha) y el de La Balsa (a nuestra izquierda).

Saliendo del Bº de La Sal.

Llegamos así, tras vertiginoso descenso, al fondo del barranco de La Balsa, por el que ascendemos durante unos cientos de metros, saboreando el frescor que se acumula todavía en esta zona protegida de los calores. En una curva a la derecha y tras una piedra característica, sale en empinado ascenso un sendero que nos saca del barranco para encaramarnos a un nuevo cordal,  que nos llevará en intensa subida hacia la Plana de la Balsa. A nuestra izquierda tendremos ahora el bº de la Balsa y a nuestra derecha el de Enmedio.

Antonia, en el sendero cabecero de los barrancos.
El esfuerzo para superar este tramo es intenso, con algún que otro tramo de falso llano pero corto. Al llegar a la altura de los pinares, que pueblan el borde de las planas, y antes de alcanzar una pequeña franja rocosa, a nuestra derecha sale un senderete que nos llevará por lo que conocemos como el "sendero cabecero de los barrancos". Bonita zona de pinos, con contínuos toboganes a la fresca de la sombra. Si no lo abandonamos y lo seguimos siempre hacia nuestras izquierdas amaneceremos al pie del último repechón al Sillón. Subirlo por su camino más empinado completa la última de las subidas de hoy. Recobramos la respiración en su cima durante unos breves minutos y descendemos hacia María de Huerva, ya por el camino normal.
Han sido "sólo" 16 km y no menos de 700 m D+ pero que han servido para tonificar las piernas, de cara al próximo fin de semana en Osan. Empezamos ya con las carreras por montaña.




Toño, Antonia, Victoriano, Sarrio Mayor, Ambargreen y Manumar.
Croquis del recorrido seguido.

lunes, 4 de abril de 2011

PETIT ARRIEL. BIENVENIDA A LA PRIMAVERA.


Tras algún que otro titubeo en cuanto al destino de hoy, más debido a la abundancia de planes en nuestra cabeza que a cualquier otra razón, mi hermano Carmar y yo, nos dirigimos al Petit Arriel (2.683 m). No es ni la primera ni la segunda vez que subimos a esta modesta cima, pero sus vistas, su comodidad de acceso y el tener una "esquiada" disfrutona, hacen de su repetición una salida perfecta..........eso y el que la última vez, allá por el 2009, nos tuvimos que dar media vuelta en el collado de Sobe.

Hemos madrugado lo suficiente (bastante) para poder estar a las 8:45 h ya con todos los "bártulos" en la mochila y caminando. El primer tramo desde el Caillou de Soques, nos permite ascender por un precioso y empinado sendero boscoso. Brotes verdes de bulbos, ramilletes multicolores de florecillas, variados trinos, arroyos cantarines. Es simplemente la primavera, que ha llegado ya a la montaña.



Alcanzamos rápidamente la entrada al valle de Arrious. La cota de nieve nos aparece un poco más alta de lo que esperábamos, sobre los 1.700 m.

Siempre que hemos visitado este "perfecto" valle en invierno , los restos de algún potente alud cruzan el camino normal de ascenso (digo lo de perfecto, porque por su morfología se merecería estar en esa foto de los antiguos libros de Geografía, para ilustrar lo que es realmente un valle). En esta ocasión los restos de aludes son muy numerosos, lo que nos da una idea de las abundantes nevadas, seguidas de lluvias y calores de estas últimas semanas.
La nieve es mucha, está blanda y es gracias al ir con esquíes, el que podemos hacer una rápida y cómoda ascensión. Sobre todo si lo comparamos con el enorme esfuerzo que se ve a algún grupo de montañeros, con los que coincidimos, y que van con la misma intención que nosotros pero...andando.

Llegamos al collado de Sobe, por el que pasamos a la vertiente española que da a la zona de La Sarra y en evidente flanqueo a nuestra izquierda, remontamos hasta el collado de Arriel entre el P. Arriel y el Petit Arriel.

Durante todo el camino nos ha acompañado una insistente brisa, que poco a poco se ha ido envalentonando, hasta convertirse a estas alturas en un fuerte y fresco viento que hace bastante desapacible la estancia. Últimas rampas hasta la cercana cumbre en donde nos juntamos ocho personas. Muchos para la escasa capacidad de su cima, lo que junto al aire, las tablas, las mochilas y las cornisas con nieve blanda, hacían de nuestros movimientos algo incómodo y peligroso.

Fotos, miradas al horizonte, guiños a nuestros próximos objetivos. Procedemos a las habituales operaciones previas a todo descenso (guardar focas, ajustar botas, ajustar fijación....), tensión en los primeros giros hasta comprobar que la nieve está perfecta, manejable, se deja hacer. Sólo puedo decir que algunos tramos durate la bajada han sido gloriosos. Seguimos apurando el descenso, paladeando cada giro, intentando prolongar esta sensación tan agradable de placer que te da el esquí de travesía.

Llegamos al coche sin prisas, con el horario a nuestro favor y sintiendo el ritmo tranquilo de esos días que cunden y dan para mucho.