lunes, 28 de julio de 2014

CEREISALEU, SALTO VERTICAL DESDE LA ORILLA.

Lejanas las montañas de León. Viaje siguiendo los pasos de peregrinos caminantes, austeras llanuras de Castilla, paisajes que van cambiando, que traen recuerdos de armaduras, de esbelta y antigua arquitectura. Recuerdos de aquellas clases de Geografía en las que nos enseñaban nombres de ríos, de sierras y montañas sobre enormes mapas colgando de la pizarra. Peña Ubiña, Navia, Sil. Paisajes que transmiten paz, montañas viejas, serenas. Para imaginar osos y urogallos en sus densos bosques. Para descansar, para estar ausente, para estar en Babia.

Llegamos así a las orillas del Sil, en el pequeño pueblo de Palacios del Sil. Agobiante calor, extraño en estos parajes, pero que nos acompañará durante toda la jornada. Recorrido corto, a penas 4 km los que unen las orillas del río (842 m) desde el que se hará la salida, hasta la cima del Pico Cereisaleu (1.797 m). Sólo 3,9 km para ascender 955 m de desnivel. Recorrido exigente, muy exigente por el calor reinante a pesar de comenzar la prueba a partir de las 18:00 h. Menos mal, por la mañana el calor durante la subida era todavía más sofocante. Terreno duro, sin descanso, constante. La dura pedrera dará paso al matorral, al piorno, lo que se nos puede antojar como terreno más cómodo, realmente nos enseñará una mayor dureza. Últimos metros en los que aquel que haya guardado fuerzas podrá arañar segundos importantes, agónicos. Una pisada más allá, un momento de relajación son suficientes para ceder instantes. Es lo que tienen los kilómetros verticales, diferentes, intensos, máximos.

La selección de Aragón acudió con cinco corredores, tras la baja a última hora de Toño Algueta por una ciática. Todos entre los mejores, siempre se quiere ser mejor, todos quieren ser el mejor.

Poco a poco, paso a paso, como el viaje de los peregrinos.


Mónica Saez, 5ª de la general
Pilar Prades, 4ª Veterana.
Maribel Martinez, 5ª Veterana.
Daniel Magallón 23º de la general.
Vicente Gutierrez, 5º veterano.







































Los integrantes de la Selección de Aragón y del Centro de Tecnificación. Presente y futuro de este deporte.

lunes, 14 de julio de 2014

FLYSCH TRAIL ZUMAIA. HÚMEDO INFIERNO.

Otro año más. De nuevo, otro mes de julio en el que nos acercamos a esta preciosa costa guipuzcoana a disputar una prueba de la Copa de España de carreras en línea, por montaña. La cuarta de este 2014. Veníamos "aprendidos", algunos, otros venían "informados", pero muchas cosas sólo se aprenden cuando son sufridas por nuestras propias carnes.

Para los de tierra adentro  el mar no es nuestro terreno, eso sí, nos maravillamos con sus paisajes, con esos olores de costa, con ese aire denso, casi dulzón que uno traga al respirarlo en los días de humedad y bochorno como el de este domingo. El lado menos agradable aparece cuando tienes que correr en esas condiciones, cuando el terreno montañoso deseado, se convierte en verdes pastos sobre fondo azul, sobre acantilados de fotografía de folleto turístico. Si además el ritmo de carrera es vertiginoso, el sufrimiento y el vacío van a ser compañeros seguros.

Gestionar fuerzas y esfuerzo, tener más o menos suerte para no despistarte y perder el camino correcto junto a algunos minutos valiosísimos. Acordarse de lo sufrido el año pasado, donde las condiciones de humedad y bochorno fueron todavía mayores que en esta ocasión. Todo enseña, de todo se aprende y al final son recuerdos y vivencias que seguro nos ayudan a mantener esa capacidad de sufrimiento que hemos demostrado tener más que de sobras. Luces y sombras, todos queremos más, mejor. Sufrir y no reblar, no habernos dejado guardada ni una gota de sudor, es suficiente premio para sentirnos orgullosos. Pequeñas pinceladas que colorean un nuevo cuadro de la Selección de Aragón. 

Javier Robres 16º
David Rebullida 23º
Vicente Gutierrez 31º y 4º veterano.
José Antonio Muro 53º
Sergio Cazcarro 77º.